MADRID. La volatilidad y la incertidumbre se han entrelazado con las oportunidades emergentes en diversos sectores de la economía global. A medida que los desafíos de la transición energética se presentan como una realidad inminente, valores en nichos de alto crecimiento estructural como el desarrollo de software, innovación digital, la industria 4.0, la automatización industrial, ciberseguridad, semiconductores... emergen como grandes actores potenciales para las próximas décadas. En un entorno donde ya notamos que los tipos de interés a largo plazo están bajando y los bancos centrales empiezan a sentirse cómodos con este nivel de tipos, el enfoque debe ser optimista, destacando las oportunidades de inversión que se abren en medio de la transformación y la evolución constante de las dinámicas globales que atraviesan nuestras sociedades.
En primer lugar, podríamos destacar el segmento de tecnología médica. A pesar de haber mostrado un comportamiento históricamente resiliente y haber realizado un buen desempeño, ha sido el sector más afectado en cuanto a la reducción de existencias y la normalización de la demanda posterior a la pandemia. Aunque la rentabilidad relativa de las acciones se ha visto afectada de cierta manera, algunas de las empresas pertenecientes a este nicho siguen exhibiendo resultados sólidos.
Por otro lado, a pesar de haber una desaceleración en la demanda de semiconductores en 2023, este segmento sigue siendo impulsado por necesidades a largo plazo relacionadas con inteligencia artificial, almacenamiento de datos, potencia informática y transición energética. En Este contexto, destaca Aixtron como un ejemplo de éxito, con un crecimiento del 69% en el segundo trimestre de 2023 y objetivos anuales en aumento; beneficiándose, a su vez, de una fuerte demanda de producción de componentes para vehículos eléctricos, industria y redes eléctricas.
En esta línea, el campo del software también ha experimentado un año positivo. Así lo demuestran empresas como Atoss Software, tanto a nivel operativo como en el mercado bursátil. Atoss Software registró un impresionante crecimiento del 32% en las ventas y del 60% en los resultados operativos durante el último trimestre, además de aumentar sus objetivos anuales. Además, la compañía continúa mejorando sus plataformas de software para adaptarse a la creciente digitalización de sus clientes. En paralelo, Nemetschek también destaca por su ejecución y transición hacia un modelo de suscripción, lo que promete un fuerte crecimiento en la facturación y los márgenes en los próximos años. Tendencias esenciales para abordar las necesidades relacionadas con las cuestiones climáticas en el sector de la construcción.
En el segmento de la automatización intralogística, subrayar el caso de Kardex como consecuencia de la aceleración de su actividad postcovid; así como HMS mantiene un buen desempeño a medida que los clientes vuelven a gestionar sus niveles de inventario de manera estándar en un entorno de normalización de pedidos.
En resumen, el año 2023 nos deja un panorama normalizado plagado de oportunidades, no solo desde un punto de vista cuantitativo. La ventana de oportunidad es clara para aquel inversor que pueda ampliar sus miras de inversión y quiera beneficiarse de algunas de las compañías más innovadoras del mundo en segmentos donde nuestra sociedad seguirá demandado de forma estructural sus servicios o productos de forma recurrente para las próximas décadas.
Iván Díez y Francisco Rodríguez d'Achille son socios y directores de Desarrollo de Negocio