VALENCIA. El secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, optó este martes por templar gaitas ante la escalada de tensión en el Gobierno valenciano por la falta de soluciones a la infrafinanciación. Una escalada provocada, primero, por la afirmación de Rajoy en el debate de investidura de que este problema no se ha abordado en esta legislatura "porque había otras prioridades", y después por la negativa del Gobierno a liberar los 400 millones de FLA que corresponden a la Comunitat por el aumento de los objetivos de déficit.
Ambas partes celebraron este martes una videoconferencia en la que, según fuentes de la Conselleria de Hacienda y Modelo Económico, Beteta se mostró más conciliador que nunca. A un lado del 'plasma', en Madrid, Antonio Beteta; la secretaria general de Coordinación Autonómica y Local, Rosana Navarro, y el subdirector general de Análisis Presupuestario y Organización Institucional del Sector Público Autonómico, Andrés de la Fuente. Al otro lado, en Valencia, el conseller Vicent Soler; la secretaria autonómica de Hacienda, Clara Ferrando, y el director general de Presupuestos, José Moreno. Como oyentes, el director general del Instituto Valenciano de Finanzas, Manuel Illueca, y la subdirectora general de Presupuestos, Pilar Gilabert, entre otros.
Beteta estuvo tan comprensivo, que hasta felicitó al equipo de Soler por el déficit de 2016, que según la previsión de la Conselleria acabará en el 1,4%, el doble del objetivo del 0,7% que se fijó para las CCAA el pasado mes de abril. Lo hizo, según las mismas fuentes, además de por el fuerte descenso respecto a 2014 -fue el 2,51%-, porque "sabía que ese objetivo era imposible" y así lo reconoció, aunque volvió a rechazar el déficit asimétrico que le viene reclamando el Consell.
Esta mejora del déficit se debe al aumento de la recaudación de impuestos propios, especialmente el de Transmisiones Patrimoniales y a los planes de ajuste que se han ido realizando en los últimos años.
El secretario de Estado no metió presión con el cierre presupuestario, que algunas comunidades ya han hecho siguiendo los pasos de Montoro, y dejó entrever que sí convocará un Consejo de Política Fiscal y Financiera -fuentes del Ministerio lo descartaron el lunes a Valencia Plaza- porque lo han pedido nueve comunidades autónomas.