VALÈNCIA (EFE). La Conselleria de Educación ha atribuido los errores detectados en la adjudicación de plazas docentes para el próximo curso a fallos informáticos y a una "mala" planificación del equipo anterior, y ha asegurado que publicará una nueva resolución para subsanar los errores lo antes posible.
Así lo ha anunciado tras una reunión con técnicos de la Conselleria y de la que se informará a lo largo de este lunes a los sindicatos.
El conseller de Educación, José Antonio Rovira, ha afirmado que la resolución se publicará lo antes posible y garantizará los derechos de los peticionarios. "Es nuestra obligación garantizar los derechos de los participantes en un proceso administrativo, y una vez que hemos tenido conocimiento de los errores hemos actuado para dar absolutas garantías", ha manifestado.
Se ha recabado un informe elaborado por el servicio de informática para la gestión educativa de la DGTIC (Dirección General de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones) en el que se pone de manifiesto que el proceso se ha visto afectado por una serie de fallos informáticos que han determinado un resultado erróneo en la publicación de algunas adjudicaciones. Ese informe está fechado el 12 de agosto, según la Conselleria.
Además se han producido errores "derivados de la mala planificación del equipo de la Conselleria anterior, ya que la programación ni se cumplió, ni se ejecutó, ni tampoco se informó al nuevo equipo de la Conselleria de la situación en la que estaba el proceso".
El conseller ha agradecido al personal de la Conselleria "el esfuerzo realizado en las últimas semanas pese a todos los problemas que se han encontrado para realizar su labor".
El informe señala que el proceso de adjudicación de inicio de curso 2023/2024 no ha sido igual que en los cursos precedentes pues solía incluir cuatro elementos: el resultado del concurso de traslados, las comisiones de servicio concedidas, los docentes que han superado las prácticas (que sacaron plaza en la oposición del año anterior) y los docentes que vienen de la oposición de año en curso, además de la adjudicación al profesorado interino.
En el proceso actual, se han añadido el concurso de estabilización de funcionarios interinos y el cambio de cuerpo de los profesores técnicos de formación profesional, según estas fuentes.
El concurso de estabilización de funcionarios ha supuesto que miles de docentes interinos cambien su relación jurídica a funcionarios de carrera, sin pasar por los procesos habituales de oposición y prácticas, lo que ha supuesto desarrollar programas informáticos ad hoc "muy diferentes a los que habitualmente se han utilizado, que se saltaran ciertas validaciones sobre los datos establecidas".
Sobre el cambio de cuerpo de profesores técnicos de FP, la Conselleria indica que ha implicado tres procesos adicionales de miles de docentes.
El informe señala que estos dos elementos singulares se llevaron a cabo "con la urgencia" que imponían los plazos establecidos por la Dirección General de Personal Docente (DGPD), que "no dio mucho margen para un análisis exhaustivo de los procedimientos ni, por tanto, a unas pruebas necesarias en tiempo y forma".
Educación afirma que la Dirección General de Personal del gobierno anterior "no actuó correctamente" ya que no se solicitó la implementación de las actualizaciones de los programas informáticos que pudieran soportar los nuevos procedimientos.
Así, en el informe se indica que el proceso "se hizo sobre la marcha y sin existir un control de calidad y sin que se pudiera hacer un testeo previo necesario que hubiera garantizado el correcto funcionamiento del sistema".
Derivado de la falta de actualización del sistema informático se han producido errores como que algunos datos se introdujeron en campos no válidos, lo que generó una ordenación incorrecta de los opositores de 2023.