Los retos culturales de una València orgullosa
Las relaciones entre la alta cultura y la cultura popular se han estrechado más que nunca en los últimos años con ayuda del colectivo LGTBIQ, que promueve cambios y pide presencia para romper con los tabús de la costumbre, de lo convencional. Martina Gual, mujer trans que trabaja en el sector de las telecomunicaciones entre Londres y València, se recrea en las vivencias que marcaron su etapa de cambios, su transformación; y ahora participa en los movimientos de arte emergente para dar visibilidad. Desde un punto de vista más popular, Rafa Soler, un joven gay de familia con orígenes sherpa, es presidente de falla por primer año y tiene inquietud de abordar muchas propuestas transgresoras para la fiesta. Dos espejos enfrentados que proyectan retos y eliminan algunas barreras que mantiene la sociedad en el marco de la diversidad sexual