VALÈNCIA. Este mes de diciembre se cumple un año de la puesta en funcionamiento de los ocho puntos de recarga para vehículos eléctricos en Carcaixent. Por ello, el consistorio ha querido hacer balance del impacto de estas instalaciones en el municipio.
Concretamente, Carcaixent dispone de cuatro puntos de recarga repartidos por la localidad y, durante este primer año de funcionamiento, desde la administración local han observado un crecimiento progresivo de su uso.
Según se desprende del informe de los puntos de recarga de vehículos eléctricos que han elaborado, en este periodo de tiempo se han realizado un total de 246 recargas de 41 usuarios distintos. De estas, 18 corresponden al punto de recarga de la calle Corts Valencianes, 73 al punto de la calle Gandia, 95 al de maestro Giner y, por último, 110 en su punto de Marquesa Montortal, donde más recargas se han registrado.
En cuanto a la media de tiempo de recarga utilizado se sitúa en 139,91 minutos. Y es en el punto de la calle Gandía donde más tiempo suelen permanecer los usuarios con el vehículo conectado: con una media de 172 minutos. El consumo total en este primer año se sitúa alrededor de los 2800 KwH, lo que ha permitido un ahorro de emisiones a la atmósfera de 3.247 kilogramos de CO2.
Cabe recordar que cada uno de los puntos permite una carga semirrápida para dos vehículos simultáneamente, es decir, con unos 60 minutos de carga se puede obtener una autonomía de aproximadamente 130 kilómetros. Según ha asegurado el consistorio, "el funcionamiento del sistema es muy intuitivo", y permite cargar el vehículo mediante una aplicación de móvil o con una tarjeta identificativa.
Por su parte, el regidor de Movilidad, Lluís Candel, ha hecho un balance "muy positivo" de este primer año: "los informes demuestran que cada vez hay más gente que opta por este tipo de vehículos para sus desplazamientos. No obstante, desde las administraciones se tiene que trabajar más para que esta acabo siendo la opción mayoritaria".
En esta línea, el regidor ha avanzado que el ayuntamiento tiene previsto sustituir progresivamente la flota de vehículos municipales por vehículos eléctricos. "El año pasado se adquirió el primero para el uso del personal que trabaja en el área de Territorio, y en estos momentos está pendiente la compra de dos vehículos eléctricos para la Policía Local con el objetivo de sustituir los vehículos convencionales por modelos eléctricos, puesto que las instituciones somos las primeras que tenemos que dar ejemplo apostando por los nuevos tipos de movilidad".
