Los Colegios de Trabajo Social protestan por "la situación de injerencia" profesional y política

VALÈNCIA (EFE). Los colegios oficiales de Trabajo Social de Castellón, Alicante y Valencia han decidido reforzar su estrategia de defensa de su espacio profesional ante "la situación general de injerencias por parte de otras profesiones, instituciones e, incluso, partidos políticos".

"En la actualidad asistimos a una elevada presión pública y privada de numerosas profesiones que están asumiendo no solo tareas que son competencia exclusiva del Trabajo Social, sino también puestos de trabajo para los cuales solo las trabajadoras sociales están formadas", señalan los colegios profesionales en un comunicado conjunto hecho público este lunes.

Admiten que progresivamente se incorporan nuevos perfiles profesionales para complementar la atención a la ciudadanía, pero consideran que "esto no puede suponer una competición por los espacios, sino una apertura, cada vez más amplia, del sistema de bienestar social, cada cual ocupando y defendiendo sus funciones, diferentes a las nuestras".

Denuncian asimismo que las trabajadoras sociales "no pueden ser relegadas a un ámbito administrativo y/o tramitador mientras que otras profesiones llegan a dirigir o a intervenir" y advierten de que "limitar nuestro campo profesional compromete una atención adecuada para la sociedad, así como la convivencia personal, familiar y comunitaria".

Los colegios oficiales de Trabajo Social de la Castellón, Alicante y Valencia creen "firmemente en la interdisciplinariedad", en una atención integral, la unión de fuerzas, de recursos y de ideas, pero no en "la división ni la suplantación".

Añaden que algunas profesiones, secundadas por partidos políticos, "pretenden ahora poder asumir la dirección de los centros de Servicios Sociales, lo cual es tan incoherente e incomprensible como si las Trabajadoras Sociales pretendemos ahora dirigir hospitales".

Ante estas injerencias, los colegios profesionales han denunciado procesos de selección de trabajo público (como fue el caso del Ayuntamiento de Burjassot); se han reunido con representantes de las consellerias competentes con aportaciones a varias propuestas legislativas; y han propiciado un diálogo activo con el resto de Administraciones Públicas, con partidos políticos y con otros colegios profesionales.

Ahora bien, aseguran no sentirse "escuchados" por lo que han decidido aumentar el tono de las reivindicaciones y plantear una nueva hoja de ruta que garantice "el derecho de la ciudadanía a ser atendida por las profesionales de referencia de los Servicios Sociales".

"Ha llegado el momento de devolver el foco al centro: no permitiremos que otras profesiones colonicen lugares y funciones del Trabajo Social", advierten.