El comparador HelpMyCash analiza el momento actual por el que atraviesa la banca móvil, que día a día gana más usuarios en España y mientras tanto nuevos competidores europeos en el sector preparan su desembarco
VALÈNCIA (VP). Si hace unos años situar una sucursal bancaria en cada esquina era garantía de éxito, ahora la batalla se libra en nuestros bolsillos. Los smartphones se han convertido en el nuevo objetivo del sector. No es para menos: el 65 % de los españoles utilizó la banca móvil el pasado año, 4 puntos porcentuales más que en 2015, según una encuesta realizada por ING. De hecho, el mismo estudio revela que España es uno de los países de Europa en los que más éxito está teniendo la banca de pequeña pulgada y, junto con los Países Bajos, somos el país europeo con mayor número de usuarios de banca móvil. Según la consultora Ditrendia, “en 2020, los smartphones serán responsable del 80 % del mercado de la banca”.
Quien más quien menos dispone de una aplicación en los supermercados de apps y algunas ya superan los cinco millones de descargas, informan desde el comparador de cuentas online sin comisiones HelpMyCash.com. Es el caso de la app de CaixaBank, la más descargada en Google Play de entre los bancos españoles, con un volumen de instalaciones de entre cinco y diez millones. Precisamente en esta entidad los clientes móviles ya alcanzan la friolera de 3,7 millones y en Banco Santander, cuya app suma entre uno y cinco millones de descargas, ya superan el millón en España. Unos números que responden al elevado grado de penetración del móvil en nuestro país y es que el 96,7 % de los hogares con al menos un miembro de entre 16 y 74 años cuentan con un teléfono móvil, según el INE.
El pasado año supuso un antes y un después en el escaparate bancario español con el lanzamiento, por parte de CaixaBank, de la primera entidad española gestionada íntegramente a través del móvil. ImaginBank, que actualmente cuenta con más de 150.000 clientes tras un año y medio de vida, pretende alcanzar el medio millón a finales de año, según declaraciones de la propia entidad al comparador HelpMyCash.com: “Esperamos que esta evolución positiva continúe e incluso se acelere a lo largo del año”. Lo cierto es que la acogida del primer banco móvil español, dirigido especialmente a los millennials, parece haber sido buena: “Hemos conseguido situar la aplicación, en estos momentos, como la mejor valorada de todas las aplicaciones de entidades financieras en España, tanto en las tiendas de Android como en las de Apple”.
Si nos centramos en el catálogo de apps disponibles para Android, la de imaginBank tiene una nota de 4,5 sobre cinco, seguida de la app de Abanca, con un 4,4 y de las de EVO Banco y Triodos, con un 4,3. La gran banca tampoco sale mal parada: las aplicaciones de CaixaBank, BBVA y Banco Sabadell tienen una valoración de 4,1. Banco Santander tiene que conformarse con un 3,6 y Bankia, con un 3,5.
Este sector, que hace un año y medio estaba en pañales, está hoy en día en plena ebullición y la llegada de nuevos actores parece cuestión de tiempo. “El cambio que estamos viviendo, más que un proceso brusco, se va desarrollando de forma paulatina pero continua”, señalan fuentes de imaginBank. De momento, Liberbank y MásMóvil ya se han mostrado muy interesados en subirse al carro. Ambas compañías están ultimando un acuerdo para lanzar un banco “de bolsillo” en nuestro país este mismo año y su objetivo sería llegar a los 500.000 clientes durante los primeros tres o cuatro años de vida de la entidad.
Si bien de momento el único banco accesible desde una app 'made in spain' es imaginBank, la competencia podría recrudecerse a medio plazo si la banca móvil europea decide aterrizar en España. De hecho, algunos ya lo han hecho. El banco alemán N26, que ya opera en 17 países de Europa, entre ellos el nuestro, y que en cuestión de un año ha triplicado su número de clientes hasta los 300.000, tenía en España a finales del pasado mes de marzo algo más de 10.000 clientes, según declaraciones de la entidad a HelpMyCash, y crece a un ritmo de más de mil nuevos clientes al día, “de los cuales más de la mitad proceden de mercados internacionales, incluyendo España. El éxito a largo plazo para nosotros sería convertirnos en los líderes de la banca digital para clientes minoristas en España”, afirma Alex Weber, encargado de mercados internacionales de la entidad sita en Berlín.
Otras entidades móviles que permiten abrir cuentas a los españoles son el inglés Monese, que ofrece una cuenta corriente móvil a cualquier habitante de la zona económica europea, sin necesidad de tener una dirección inglesa, y Ferratum Bank, sito en Malta, cuya cuenta corriente está exenta de comisiones y que ofrece una rentabilidad del 0,40 % en su cuenta de ahorro.
Entre los que aún no han llegado, destaca el francés Orange Bank, perteneciente a la operadora móvil naranja, que se estrenará en Francia el próximo mes de julio y que podría aterrizar en España en 2018, tal y como anunció Laurent Paillassot, el consejero delegado de Orange en nuestro país.
Falta por ver si otras entidades europeas podrían reclamar un pedazo del pastel nacional. Lo cierto es que no son pocos los candidatos, o como mínimo son varias las entidades que llevan tiempo haciendo 'ruido' en el continente. Atom Bank, participado por BBVA en un 29,5 %, comenzó su andadura en el Reino Unido en abril del pasado año como una entidad accesible únicamente desde una app, después de haber obtenido su licencia bancaria un año antes. La entidad inglesa ya ha conseguido captar 219 millones de libras de inversores privados e institucionales como BBVA, Woodford Investment Management y Toscafund Asset Management. Soon Banque y Hello Bank, de Francia, el germano Fidor Bank, el neerlandés bunq y los ingleses Starling y Monzo son otras de las entidades móviles que ocupan el escaparate financiero europeo.
La característica principal que comparte este tipo de entidades, además de ser accesibles desde el smartphone, es la simplicidad en su oferta de servicios. Aunque poco a poco están ampliando su catálogo, como N26 que ahora permite a los ahorradores alemanes contratar depósitos a través de la plataforma Raisin o Atom Bank que desde diciembre comercializa hipotecas.
Un punto fuerte de la banca móvil es la innovación y la inclusión de nuevas herramientas que ofrecen una nueva experiencia al usuario. Imaginbank permite enviar dinero por WhatsApp u otras aplicaciones de mensajería instantánea como Telegram o Facebook Messenger gracias al teclado imaginBoard, una funcionalidad que también acaba de incorporar BBVA con su servicio Cashup. Pero ¿realmente valoran los clientes este tipo de gadgets? Desde imaginBank afirman que el balance está siendo muy positivo, “no solo por el buen nivel de uso por parte de los clientes, sino también por toda la experiencia y aprendizaje que se consigue con estos proyectos”.
Pero no todo podían ser ventajas. Su propio planteamiento hace que carezcan de oficinas, mientras que las entidades tradicionales pueden conjugar las sucursales con la digitalización. Un análisis de Matica Technologies revela que el 65 % de los españoles encuestados en su estudio quieren seguir disfrutando de las oficinas de bancos. El estudio también pone de manifiesto que el 65 % de los participantes que valoran las sucursales quieren que los servicios ofertados en las oficinas estén ligados a la actividad online.
Queda el interrogante, pues, de si el futuro de la banca será la banca móvil o si, por el contrario, el secreto del éxito será combinar una sólida red de oficinas, que no olvidemos que se ha reducido considerablemente durante los últimos años, con una apuesta por la digitalización.