VALÈNCIA. Un estudio de la Universitat Politècnica de València (UPV) sobre la viabilidad operativa y de explotación de un tren lanzadera entre Sagunto y el Puerto de Valencia para el transporte de contenedores concluye que esta conexión sería inviable sin una actuación en paralelo en toda la cadena logística.
La Asociación de directivos y empresarios logístico Propeller Valencia ha presentado este viernes las conclusiones de este estudio, elaborado por un equipo liderado por el especialista en ferrocarriles Ricardo Insa, ingeniero de Caminos, Canales y Puertos y profesor del Departamento de Transportes en la misma universidad. En ese equipo también se han integrado los socios de Propeller Yolanda Atiénzar (directora de Slisa) y Pedro Catalán (director de Logitrén).
El equipo que ha desarrollado es estudio indica que la actual capacidad ferroviaria de las terminales de contenedores del puerto de Valencia “imposibilita atender la lanzadera” y esto sólo será posible “incorporando las 6 nuevas vías de la terminal norte”, dedicando 4 de ellas en exclusiva a este tráfico.
Por otro lado, los expertos de la APV consideran que “la factibilidad de la lanzadera está totalmente condicionada por el desarrollo de Corredor Mediterráneo tanto en su infraestructura como en los plazos”. De la misma forma, aseguran que atender el 100% de la demanda futura de esta lanzadera exigiría “una implicación por parte del ADIF”.
Tal y como queda de manifiesto en el estudio, en base a la experiencia empírica en este tipo de proyectos “no parece realista mejorar la eficiencia operativa, económica y medioambiental de los tráficos por carretera al recinto portuario mediante una lanzadera entre Sagunto y el puerto de Valencia”.
Las conclusiones del estudio advierten de que “si no se actúa en paralelo en todos los eslabones no tiene sentido un proyecto de este tipo”. Asimismo, indican que “cualquier retraso en los escenarios de ejecución de infraestructuras a medio y largo plazo penaliza esta alternativa”.
El estudio va a ser editado en las próximas semanas y será presentado por por Propeller Valencia ante asociaciones, instituciones y representantes de los diferentes grupos políticos.
Tal y como ha asegurado el presidente de Propeller durante la rueda de prensa, “antes de hablar nos gusta informarnos bien, y para ello recurrimos a expertos para que realicen los análisis con rigor, conocimiento e imparcialidad”.
Según Pedro Coca, “a la vista de los resultados del informe, somos muy escépticos respecto a la viabilidad operativa y de explotación del tren lanzadera. Todo es factible, evidentemente, pero empíricamente se demuestra que en este caso concreto su viabilidad es muy complicada”.
El presidente de Propeller ha querido matizar tras esta afirmación que “eso no quiere decir que no necesitemos un nuevo acceso ferroviario al Puerto de Valencia. La construcción del túnel pasante liberaría Serrería y permitiría habilitar esa nueva conexión”. “Apostamos por el desarrollo del transporte ferroviario, por supuesto, y apoyamos un crecimiento económico basado en la sostenibilidad”.
Finalmente, respecto al Acceso Norte por carretera al Puerto, Coca ha recordado que en estos momentos se está a la espera de conocer el estudio de alternativas de Ineco. No obstante, ha asegurado que “no se va a poder evitar una conexión por carretera y en túnel al recinto portuario valenciano”.
En primer lugar, porque la previsión apunta a que podría alcanzarse un tráfico de hasta 10 millones de TEU (que difícilmente soportaría un acceso ferroviario); porque en la actualidad sólo hay un acceso al puerto por el sur (y claramente se necesita otra conexión) y porque la pendiente máxima que puede afrontar un tren de mercancías (en la salida del túnel) no puede superar las 18 milésimas”.
El informe presentado esta mañana se suma al promovido en 2020 por Propeller Valencia, Cámara de Comercio y CEV sobre el impacto económico y social de la Terminal Norte de Contenedores del Puerto de Valencia, también elaborado por los técnicos de la Universitat Politènica de València, y que recientemente ha servido como base al Gobierno de España para responder una pregunta parlamentaria en el Congreso.